lunes, 19 de diciembre de 2011

Saludo navideño



Amigos, hoy quiero dejarles un saludo navideño pero no de los comunes, con una tarjeta y nada más, hoy quiero decirles algo que pienso y por lo tanto es mi pensamiento y me creencia, cada uno está en libertad de pensar como quiera, pero yo me siento en la necesidad de decírselos: No olvidemos que en Navidad nació Jesús, nuestro Salvador, no adoremos a ese personaje extraño, gordo, vestido de rojo y todo abrigado para nuestras latitudes, llamado papá noel, que no tiene nada que ver con la festividad que recordamos los cristianos. Noel, es como tantas otras cosas traídas del norte, como la ridícula fiesta de brujas, y otras muchas costumbres que no son nuestras y que no hacen a nuestra idiosincracia.
Con el tema de la Navidad específicamente, es con lo que más me duele, nadie se acuerda de que ese día nació Jesús!! Todos corremos alienados en busca de comida y bebida como si ese fuera el último de nuestros días, además la mayoría adora, y lo que es peor, hacen adorar a sus hijos y nietos a Noel, ese viejo ridículo, vestido con inmenso abrigo con nuestros treinta grados y que sólo trae regalos a los que pueden comprarlo, porque para muchos chiquitos... no llega. Saquémosle de la cabeza a nuestros niños una creencia oriunda de quién sabe dónde y sólo recordémosle que es al Niñito Jesús a quien veneramos en la Nochebuena y Navidad, ya que Él vino para salvarnos, por lo menos hagámoslo los cristianos que se supone que en esto creemos, los que no lo son que adoren a cuanto buey pagano se les ocurra pero no lo inculquen a nuestros niños. Feliz Nacimiento de Jesús para todos! Melan.





Nota. Por favor selecciónenlo para poder leer bien porque quedó muy clarito al 


copiarlo de donde lo escribí originalmente, en mi facebook 


y no se nota bien al leerlo. Gracias. Melan

domingo, 18 de diciembre de 2011

Mutación



Ser únicamente la sombra de una mujer, sin razgos definidos, sin mirada que denote su tristeza, solamente una silueta, eso solamente quería ser ella después de tanto dolor, quería transformarse, quería mutar, quería dejar de ser quién era... Y lo logró, un pintor necesitaba una modelo y se presentó, la eligió a ella por sus formas armónicas, Henry Matisse la transformó y ella al mirarse se sintió otra y por fin... fue feliz. Hoy cuelga orgullosa de una pared del Museo del Prado.

Melan.